viernes, 9 de febrero de 2007

Trágica pérdida

Una Jirafa del zoo se partió el cuello


Un terrible episodio se registró en las últimas horas en Suecia. El animal iba a recibir anestesia cuando se le cayó encima al médico, que debió ser trasladado al hospital.

El examen médico rutinario de una jirafa en un zoo de Suecia terminó en tragedia cuando el animal, anestesiado, se cayó y se partió el cuello, informó el jueves la prensa sueca.

La jirafa, que murió en el acto, estuvo además a punto de llevarse consigo al director del establecimiento, quien recibió siete puntos de sutura en la cabeza a causa del descalabro.

La desafortunada criatura se llamaba Maans y era un macho de dos años que vivía en el zoo de Kolmaarden, a 160 km al sur de Estocolmo, y que iba a ser anestesiada para sufrir un análisis antituberculosis.

Anestesiar una jirafa es una operación complicada, para la que se necesita poner al animal contra un muro y usar otra pared portátil para contrarrestar su caída cuando pierde el conocimiento, explicó Mats Hoeggren, un responsable del zoo, al diario Norrkoepings Tidningar.

Sin embargo, algo salió mal en este proceso y la jirafa, de 400 kilos de peso, cayó sobre el director del zoo, Lennart Suden, que se encontraba al lado del animal para sujetarle el cuello.

El hombre fue trasladado al hospital urgentemente y recibió siete puntos de sutura en la cabeza.

Los análisis revelaron que la jirafa no tenía tuberculosis...

Fuente: http://www.infobae.com/contenidos/300673-1100795-Una-jirafa-del-zoo-se-parti

4 comentarios:

Kluivert dijo...

Qué bronca, loco. Pobre jirafita. Esta noticia me puso muy mal, la concha de la lora.

Anónimo dijo...

Mi más sentido pésame a la jirafa y mi expresión de apoyo más sincera a todas las jirafas que hoy y siempre siguen adelante en el dificil camino de ser puro cuello.

Anónimo dijo...

Mi más sentido pésame a la jirafa y mi expresión de apoyo más sincera a todas las jirafas que hoy y siempre siguen adelante en el dificil camino de ser puro cuello.

Anónimo dijo...

Me mató...
Saludos, Nikki