sábado, 9 de junio de 2012

La imagen no es nada, la sed es todo (?)

Un nene "resucitó" en su velorio

Tiene dos años y a su familia le habían dicho que había muerto, pero se levantó de su ataúd para pedir un vaso de agua.


"voce tem agua?" (?)
Un niño de dos años que había sido dado por muerto sorprendió a su familia al despertar en medio de su propio velatorio para pedir un vaso de agua. El caso se registró en la localidad brasileña de Belem, donde los padres del pequeño expresaron su dolor y furia porque los médicos "no lo revisaron bien".

Kelvin Santos, de dos años, fue dado por muerto en un hospital por una neumonía. Los médicos le devolvieron el cuerpo del pequeño a sus padres, que lo velaron durante toda la noche y se disponían a enterrarlo al día siguiente, si no fuera porque lo vieron levantarse de su ataúd, informó el sitio inglés The Sun.

Una hora antes de que partiera el cortejo fúnebre desde la casa de los Santos, el pequeño Kelvin se incorporó en su ataúd y dijo: "Papá, ¿me das un poco de agua?", a lo que sus progenitores y demás deudos quedaron estupefactos. "Todos empezamos a gritar. Creímos que había ocurrido un milagro", explicó Antonio Santos, el padre de la criatura.

Pero la felicidad que siguió al estupor inicial duró poco. "Kelvin se volvió a acostar. No lo pudimos despertar más. Se murió de nuevo", relató dolido su padre. La policía de Belem intervino en el caso y el hombre aseguró que podría ser un caso de mala praxis porque "quizás no lo examinaron bien. Los muertos simplemente no se despiertan y hablan".


Fuente: Minuto Uno


Apenas sintió la conga, el muerto se fue de rumba
Opinión
Por Ulises Leal




Ya lo decían Las Sabrosas Zariguellas en aquel hit noventoso.
He aquí un caso mas de un  muerto que se levanta en pleno velorio y genera la sorpresa de los presentes.
Y no es el primer caso que conozco de resucitación. 
Acá en Isidro Casanova pasó una vez. El día en que el finado Gutierrez se despertó en plena congoja barrial.
Resulta que tipo laburaba en un frigorífico y tuvo la mala suerte de quedarse encerrado en la cámara de frío. Lo encontraron tres horas después congelado abrazado a una media res.


En el velorio estabamos los muchachos, entre incredulos y sorprendidos de la mala suerte, y no va que Gutierrez se levanta y pide una campera al grito "Me estoy cagando de frío!". Del cagazo palmó Doña Isidora que andaba ya por los noventa y pico.
Al igual que el caso de este niño, el finado Gutierrez luego de abrigarse volvío a morir.
La única buena noticia fué que la casa de velatorios les hizo una promoción 2x1 y a la vieja la velaron al lado.


Así que no me sorprenden estos casos cada vez que llegan a mis oídos. Seguramente el niño Kelvin, con el calor que hace en Belem, necesitó un trago de agua fresca para no morir con la garganta seca.   

1 comentario:

Anónimo dijo...

jajajajajaj jajajajaj jajajaj ajjaj
muy bueno el blog!

saludos

p.