Sotana para una (?)

Nina Peloso, al hospital por el baile del caño

La líder piquetera sorprendió a todos con su sensual performance en el palo de hierro. Sin embargo, tuvo que acudir a un centro asistencial por un desgarro en el tórax

Nina Peloso fue de las más halagadas por su performance en el caño. La esposa de Raúl Catells demostró su sensualidad y obtuvo un buen puntaje de los jurados.

Sin embargo, el show le costó algunas heridas que derivaron en un posterior traslado a un hospital. Según indica el portal Primicias Ya, tuvo que acudir a la guardia por un desgarro en el tórax.

Nina no es la única que resultó herida tras el show de Bailando por un Sueño. Iliana Calabró y Liz Solari revelaron que debieron pasar sus piernas por maquillaje para tapar los moretones.

Y Juanita Repetto sufrió un fuerte golpe en una de sus rodillas y su madre Reina Reech debió llevarla a la guardia de traumatología.

Fuente: http://www.infobae.com/contenidos/319782-600795-0-Nina-Peloso-al-hospital-el-baile-del-caño

A los caños

Opinión

Por Nikki Sixx

Y sí, ser trola no es fácil. Hay que dejar atrás todo un pasado de corrección humana, de valores, de tapujos, tabúes y autoestima, de patadurismo en el arte de seducir bailando y revoleando las carnes, para que la nueva atorranta de turno se exponga disfrazada de Sarah Kay, embadurnada en jalea de membrillo y asi excitar el morbo pedófilo de la teleaudiencia masculina, y todo con una sonrisa sugerente.

La señora Peloso de Castels venía bien, no se comió la apoyada ni del gobierno ni de extrema derecha, pero a cambio decidió refregarse el frío y grueso caño de la pista de Tinelli por su repugnante esfínter, evidentemente necesitada de algo que el señor Raúl Castels, entre piquete va, piquete viene, discusiones políticas, lookearse la barba, prender fuego neumáticos, hacer afiches y el tedio de tener que ir de shopping a comparse ponchos, lo distrae, lo estresa, le genera flaccidez y ya no puede ofrecerle la gomosa rigidez típica de la morcilla provinciana y de su pasado campeón.

Ahora, señora Nina, con todo el respeto que usted me merece: ¿por qué no se deja de romper las pelotas? ¿Era necesario? Una mujer como usted, bien, combativa, de su casa, con ideales, reducida a una golfa barata de cabaret de Plaza Miserere, dándole un mal ejemplo a niños, jóvenes y ancianos que usted representa y a la cual admiran, les está transmitiendo un mensaje bastardo que logrará malinterpretarse.

Porque ahora, claro, lo común será que la clase baja, obrera, tan injustamente golpeada, opte -ante la necesidad- por plantar su dignidad delante de un caño por algunos sucios billetes y exponerse a un desgarro de tórax, antes que le desgarre el culo el gobierno. Hágame el favor y siga con lo suyo. Gracias.