lunes, 16 de abril de 2007

Qué pica, la pica dura

La araña y la impotencia

El descubrimiento proviene de un centro médico israelí. Varios hombres picados padecen erecciones extrañamente prolongadas. Convocan a compañías farmacéuticas a que se sumen en los estudios.




El Rambam Medical Center de Haifa (Israel) ofrece una noticia revolucionaria en el mundo de la medicina, especialmente importante para todos aquellos que sufren impotencia. El veneno de las arañas serviría como cura para la disfunción masculina. Es que desde que científicos israelíes descubrieron que los hombres mordidos por las arañas padecían unas erecciones extrañamente prolongadas, se encuentran investigando si las toxinas segregadas en su veneno pueden combatir la disfunción eréctil.

El estudio nació de una manera curiosa, ya que los científicos se aventuraron a investigar esta posibilidad tras descubrir que los hombres mordidos por las arañas padecían unas erecciones extrañamente prolongadas, según publicaba el Yediot Aharonot.

Según publica el portal 20minutos.es, el urólogo Ilan Gruenwald, de la unidad de neurología del Ramban, ya invitó a varias compañías farmacéuticas a participar en los estudios y muchas de ellas han mostrado su interés. Explicó que tres tipos de arañas originarias de Sudamérica y Africa (una de las cuales es la viuda negra) serán criados en un hábitat especial para extraer su veneno con una esponja especial. La idea es que no haya necesidad de ser mordido por las arañas para poder disfrutar de la erección prolongada.

Fuente: http://www.infobae.com/contenidos/311236-1100795-0-La-araña-y-la-impotencia






Lo excitante del veneno de araña
Opinión
Por Kluivert


La Naturaleza es sabia, señores. Allá en la Edad Antigua, era la Madre del Mundo, y todas las respuestas las tenía ella. Hoy, en la Modernidad, el Hombre y su Razón son quienes ocupan ese lugar, someten a la Naturaleza, y así nos va.

Día tras día, mes tras mes, año tras año, década tras década, siglo tras siglo, milenio tras milenio, la Naturaleza demuestra que tiene la posta, que no hay invento del Hombre que pueda más que ella. Y acá, ahora, con la novedad de que la impotencia se cura con veneno de araña, tenemos otra prueba.

Los grandes laboratorios se toman la cabeza, las farmacias hacen lo propio; los días del Viagra están contados, comerciantes de lo artificial y las sanaciones químicas, que tanto llenan sus bolsillos. Ordas de impotentes aguardan en vilo la llegada del veneno salvador, incluso hay quienes se hacen picar por cuanta araña ven pasar cerca suyo. ¡Enhorabuena, señores, que reconocemos en lo natural toda salvación!

Y ahora una advertencia que por final no es poco importante: cuidemos a las arañas, no las entreguemos a la mano de los violadores de la Naturaleza, que lucran con su dolor. Ellas nos darán lo que buscamos, si lo solicitamos como corresponde, si le damos el buen uso que provee. Si nos equivocamos, la Naturaleza tomará revancha, otra vez.

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