¿Qué les parece "Garganta profunda"?

Polémica en Brasil por el nombre de una de las más espectaculares maravillas de la naturaleza.

Un grupo de religiosos de Brasil y Argentina reclamaron a las Autoridades de Foz de Iguazú cambiarle el nombre a la Garganta del Diablo, zona de suma importancia turística de las Cataratas del Iguazú, por uno de carácter divino y no satánico.

"Las cataratas fueron creadas por Dios en un momento de gran inspiración, por eso no es justo que se continúe con el nombre por el cual son conocidas", argumentó el pastor Nelio Sander, de la Iglesia Evangélica Ceifa de Brasil.

El secretario de Turismo de Foz de Iguazú, Sergio Lobato, se reunió la semana pasada con unos doscientos líderes religiosos de ambos países por este tema, y también se encontraron ayer. Evidentemente, no hablamos de una cosa efímera.

El pastor Sander propuso llamar a esa parte de la famosa catarata ubicada en esa triple frontera "Voz de Dios", alegando que la Biblia indica en varios pasajes que la voz divina es como el sonido de las aguas.

"Llevé el tema al alcalde y la sugerencia es que se realice una encuesta a nivel nacional", declaró el secretario Lobato, que admitió haberse sorprendido con el reclamo.

Lobato añadió que se discutirá cuál sería la metodología para un eventual cambio de nombre para este lugar, considerado Patrimonio de la Humanidad, y que además deberán participar autoridades del sector turístico.

"Mi opinión será la de la mayoría", agregó el secretario de Turismo.

Fuente: http://es.news.yahoo.com/21042007/159/piden-cambiar-nombre-garganta-diablo-mas-divino.html

¡Vade retro!
Opinión
Por P*



Una blasfemia. No hay otro modo de considerar el ignomioso nombre que le fue dado a una de las maravillas de la naturaleza que adorna la frontera argentino-brasileña.
La "garganta del diablo", tal el título irrazonablemente adjudicado a esta magnífica creación divina, resulta un contrasentido, una ofensa y hasta una burla a nuestro ser creyente.

Esta noble iniciativa impulsada por religiosos de ambos países no hace más que poner el foco en el espinoso tema de los derechos de autor. ¡Resulta inexplicable que se invoque al Diablo para mencionarlas cuando es Dios Todopoderoso el único autor responsable de la creación de las cataratas!

¿Qué sucedería si nuestros santificados destinos turísticos --Santa Teresita, San Bernardo por nombrar sólo algunos-- se llamarán Lucifer o Mefistófeles? ¿Qué clase de vacaciones serían esas? Seguramente unas muy poco felices, dedicadas a la vida licenciosa y sumidas en el pecado.
Señores, está en nuestras manos evitarlo, llamando a las cosas por su nombre.

No nos dejemos engañar, evitemos las confusiones y demósle al Supremo Creador el crédito que se merece.
No neguemos la presencia divina en cada cosa bella de este mundo. ¡Apoyemos fervorosamente el cambio de denominación de este fabuloso salto de agua y roguemos para que Dios lo conserve así por siempre!

*Vividora.