Otra vez el quilombo con los trenes

Cuestión de peso
Opinión
Por Kluivert



Ayer un grupo de malvivientes destruyó sin el más mínimo miramento todo lo que tenía a su alcance en la estación de trenes de Constitución, en un acto de características vandálicas, terroristas y anticristianas.

Como es costumbre, los irresponsables de siempre los justificaron, argumentando que no sólo reaccionaron ante la suspensión del servicio, sino que fue una explosión ante los maltratos que los pasajeros viven a diario, ya que "viajan como animales, como ganado", "llegan tarde a todos lados", y distintas cosas por el estilo, propias de gente débil que todavía no se hizo hombre.

Sergio Taselli, el titular de Metropolitano, la empresa que tiene la concesión de estos trenes, fue claro: "No viajan como animales". Y si él lo dice, hay que creerle, carajo.
Y, además, denunció lo que todos creen y nadie se anima a decir: "Pienso que los pasajeros se enojaron mucho, pero no fueron los pasajeros lo que hicieron los desmanes". Es obvio, señores: hay una mano negra que quiere boicotear la excelente gestión de Metropolitano. Tal vez sea el Grupo Quebracho, malditos hijos de Marx.

Para Mí, lo que sucede es obvio, a pesar de que todavía nadie lo haya dicho. La Argentina es uno de los tres países con más obesos del Mundo. ¿Cómo quieren viajar cómodos si son todos una manga de gordos come patys?

Bajen de peso, lechones. Siempre es más fácil quejarse y desligar a otro la propia culpa. Prueben en Cuestión de peso, por ejemplo. Y verán que se puede viajar más cómodo.